20 sept 2009

La obviedad me repulsa a mi polo opuesto, me encaja en una sociedad de animales, de pecados, de delirio, un infierno no tan infierno, como lo llamaría mi otro ser…tontamente sigo pensando, pues de eso se alimenta mi alma, de restos, de preguntas, de subjetividades, de vacios no tan vacíos…
Todo es tan subjetivo, todo es tan primitivo, que de la mucha grandeza que padezco me vuelvo pequeña, diminuta en este universo carcelero…quiero más que llorar, algo que me saque esta espiga que ni con la mejor suplica he podido arrancarme, es un nudo que estanca inconscientemente, es un estorbo en mi vida. Indirectamente, proporcionalmente no soy nada, ni en masa, ni en espacio…ocupo solo algo ligero y roto en el tiempo…quizás un llavero de algún candado viejo…o algo intangible que se pueda tocar.
El mismo cuento, las mismas notas, las mismas palabras, mi mismo repertorio…una y otra vez, cíclicamente…una ironía, falsedad, no me escuches pero ya se que sordo estás. De todas formas Luna de miel, ignórame como siempre, no ames a este ente de pesares, no te fijes en mis quejas si no en el cansancio de mis palabras, en que no quiero críticas ni opiniones si no solo ser escuchada.

para papá:

Un complejo plan el cual inconscientemente no quería llevar a cabo, una sonrisa perdida por el orgullo, un tiempo otoñal escarnecido…el tiempo me pasa la cuenta, como me pesa, como me falta el tiempo. Ayer y todos los días antes, mucho antes de irte y dejarnos como si fuéramos dos desconocidos. Aprendí a llevarme tu dolor y el mío, anoche busque desesperadamente tú número, pero ya se había ido de mis recuerdos, como una pastilla anestesiante que había surgido su efecto. Encontré un par de fotos antiguas que hace tiempo atrás había guardado en mi cajón, las saque y una por una las iba rodando, me sentía como una película fragmentada, como un escarabajo arrastrándose por el piso, como una sombra vacía y sin memoria.

Me pregunto si a ti te pasó lo mismo…
Son las estaciones las que cada vez cambian, las circunstancias que dan botes en el unísono y los placeres culpables que no poseen adioses. Ayer todo se mezclo y se disolvió en un agujero sin fin. A lo lejos mi madre lloraba despacio conteniéndose la melancolía de perder a un hijo. Se escuchaban los cantos tan armoniosos que llenaban todo el palacio, como amaba el eco que producían, mas que a mi propia vida. Son cristales de rocío provenientes del cielo, que iluminan lo pecaminosos que somos algunas veces y lo poco que escuchamos. Un silencio nupcial, era yo y esa pared en la cual siempre me apoye, mi eterno silencio chocaba con las melodías que salían de la boca que se posaba en toda la multitud, frente de ella no sentía, no lloraba, no dolía, solo dejaba un espacio intangible dentro de mi pecho, hasta para mi misma se me hacia difícil escudriñar, sin dimensiones, abismante. Afuera corría deprisa el viento, quería acariciar los viejos pilares de mármol que sostenían las ilusiones, pero por más que lo intentase, caían como la pluma livianamente dejando marcado el piso. Era un espejismo para todos, una sombra que se dibujada en cada recuerdo y dejaban irse en aquel lugar.
Respiro en el holocausto, quede lo que quede, porque lo demás esta de sobra, vuelo entre tu olvido, y en el del otro, ahorco mis instintos y me pudro cuando por suerte veo mi reflejo dentro de tus ojos, o dentro de los míos. Da igual los mismos cuadros cíclicos de siempre, mimos alojados en mi mente, son vacios dentro del rojo palpitar…es como estar sentada e inmóvil, con la vista perdida en un punto sin vida, viendo tu rededor pasar lleno de ímpetu y magnificencia, viendo que todo se mueve menos tú. Uno continúa por dualidades, por el destino, por la forma de reír…caes y te vuelves a levantar, diciéndole a más de alguien o algo adiós o nunca más. Sabiendo que adioses o nunca no existen dentro de nuestro inconsciente, pero lo repetimos para dar cabida a nuestra realidad y cordura, para saber que somos eso. Cada suspiro es uno mas dentro de las cosas que he aprendido, sé que la gente no entiende, sé que juzga tu actuar, por como te vez, por lo que comes y por como lo botas, pero también sé que son pocos los que te aceptan así tal cual, siendo un vil moribundo o el rey de algún mundo…y aprenden a sentir algo especial por ti. Pero también se y cada presente de mi sentir negativista me recalca que todo acaba algún día, algún día…acabare, acabaran y acabara. Teniendo la palabra “siempre” tatuada en la frente como la mentira mas grande de la esperanza. Casi todos sienten su casa, su ambiente, aquel que no pide pase de entrada, ni un rostro hermoso, te lo dan gratis y tu lo aceptas sin pensarlo dos veces o quizás tu lo formas sin mayores esfuerzos, es tan fácil vivir en el, al fin y al cabo es tu hogar el querido infierno. Acaba luego ya, deja cerrar estos ojos que no desean ver mas, acaba ya que este corazón sufre al sentir, acaba y pon silencio en mi boca…o empieza a darle sentido a lo que respiro, empieza a vivir y a soñar…y a darle compañía a mi soledad.
Veremos estrellas de puñados caer, escupiendo en las caras de quien los incitará a la locura. Culminaremos bajo tierra sin saber como llegaremos hasta allí.
Creeremos en lo ilusorio de la vida para poder reír y lloraremos tal como seremos felices.
Vestiremos disfraces para ir por la vida con una identidad, nos fundaremos en falsos testamentos que se destrozarán en paralelo con la verdad. Llegara mucha gente que besara tú espalda porque será incapaz de besarte los pies.
Conocerás animales mutantes hambrientos por el éxito y los escapularios de buena suerte que se desdibujan en cada fracaso.
Elegirás lo que quieres para ir viviendo y marcarás otras vidas para seguir caminando, pagando los costos que cada una tiene.
Fundaras tú corazón con el amor inocuo que te enseñará a volar y al inicuo que te traerá de vuelta a la tierra.
Todo se basará en un ciclo infinito el cual nunca te consumirá.
Hablarás de lucha, hablarás de ganar y nunca pondrás en tu boca la debilidad.

La Burla

Se ríe de mí cada vez que paso cerca…
Se mofa de mi voz…y yo sin decirle nada
Cansada de darle la espalda sabiendo que lo seguirá haciendo,
Y siempre será la misma historia.
Que irónico es, hasta puede contagiarme de su burla hacia los demás…
Hacia lo sustanciales que son unos
Y Otros siendo nada…
Y es triste darse cuenta que algunos “ocupan” la risa
El ciclo de la ignorancia y de la bajeza
Oh! Que me libre de cometer tal error
Tal inconsecuencia, porque de mi no saldrá la burla con malicia…
Ni pensares sublimes de tal aberración…

pensamientos...

Dar cabida a la mentira, salvación que opaca el alma, limita en un espacio grande. Hay tantas maneras que solo se ve las que hieren. Los recuerdos no son paredes desechables, ni cuentos de hadas, porque cuando se perdona se olvida.
Cansancio mental una fruta podrida ya no quiero quejas, si no bienes con que surgir. Enterrado los deseos descomunales de alguna sociedad secreta y prohibida, que acuñó lo más bello que jamás sentí, fue entre un tal vez, o solo una probabilidad que se convirtió en verdad.
Primero pierde mucho para saber cuan valiosa son las cosas. Hablar de cantidades intangibles en el cielo abstracto que por consuelo llega la luz que hipnotiza pero no es más que una invención de tu seguridad. Pasos da malos cálculos, movimientos bruscos y estremecedores que desequilibran al bien humano. Interrupción de una vida no-vida, holocausto como se debe de llamar.